Muy
a gusto se encontraba entre los aromas y colores de aquel mayo, cuando llegó
ella a interrumpir el curso del paraíso con el tormento de sus anhelos. A
regañadientes la admitió en su primavera como parte de un catálogo de flores
raras, y al languidecer los días iba creciendo su temor. Ya en la medianía de
agosto hubo que despedirla sin sospechas, consecuencia de la estación y el
disgusto ante todo aquello que nunca pudo poseer.
Débora Ochoa Pastrán, 28 anos, Caracas, Venezuela
Desafio nº 50
– Com as palavras AGOSTO; A GOSTO;
A CONTRAGOSTO; DESGOSTO
Sem comentários:
Enviar um comentário